10 CONSEJOS
QUE DEBES SABER PARA AHORRAR
TIEMPO Y DINERO
ANTES DE COMENZAR TU OBRA

Felicidades, si has llegado hasta aquí es porque tienes entre manos una de las cosas más bonitas de tu vida, crear tu propio hogar a tu gusto.

No te voy a mentir, será un proceso largo y pasarás por muchos estados de ánimo, desde la ilusión más brutal hasta el agobio, de vez en cuando te invadirá una alegría enorme y otros en cambio, asomará la desesperación. ¿Y por qué digo todo esto? Porque como te he dicho al principio, no quiero mentirte.

Pero también te traigo buenas noticias, quiero que sepas que me tienes al otro lado, para ayudarte en lo que necesites. Y para evitarte dolores de cabeza, aquí te dejo 10 consejos que te ayudarán a ahorrar tiempo y dinero antes de comenzar tu obra. Después de muchos proyectos y muchos clientes a mis espaldas, hay errores y comentarios que se repiten una y otra vez, al fin y al cabo, somos humanos.

1. PIENSA EN TUS NECESIDADES

Analiza tu día a día y establece tu orden de prioridades. La vivienda tiene que resolver tu estilo de vida y tus necesidades diarias y las de tu familia. ¿Cuántas habitaciones necesitas? ¿Cuántas veces vas a tener invitados? ¿Cocina abierta o cerrada? ¿Qué objetos necesitas guardar? ¿Qué echas en falta ahora? ¿Trabajas en casa?

Es importante que a la hora de pensar como queremos que sea nuestra vivienda, reflexionemos acerca de nuestras necesidades, y así poder optimizar el espacio y evitar que nuestra inversión se convierta en un fracaso.

Recuerda que no todos somos iguales y por tanto nuestras casas tampoco deberían serlo.

2. CUENTA CON UN PROFESIONAL

Pensar que podemos solos es una idea muy extendida, y de verdad te aseguro que es uno de los grandes errores que cometemos cuando nos planteamos llevar a cabo una obra por nosotros mismos.

Recurrir a un profesional que estudie tus necesidades, te escuche y te asesore, además de acompañarte durante todo el desarrollo de la obra, te hará disfrutar del proceso y te garantizará la seguridad y tranquilidad de que tu casa se construye correctamente.

Contactar con un arquitecto y/o diseñador de interiores es la mejor decisión que puedes tomar antes de comenzar una obra, pues es capaz de dar con la distribución óptima para tu vivienda, proponer el uso de los materiales más adecuados para las necesidades del hogar, así como utilizar una iluminación adecuada para crear espacios acogedores. Además, contar con la figura de un profesional te permitirá disponer de un proyecto detallado antes de comenzar la obra y te solucionará posibles problemas que puedan ocurrir durante el proceso, lo que se traduce en un ahorro de dinero a futuro.

Contacta siempre con un equipo fiable, con el que conectes y que esté dispuesto a dejarse la piel en tu proyecto.

3. NO ESCATIMAR EN ELEMENTOS OCULTOS

No todos los años tenemos la oportunidad de crear nuestro hogar, por lo que antes del inicio de la obra debemos tener claro en qué queremos invertir nuestros ahorros. Tener claras las prioridades nos evitará los famosos “y ya que estamos”.

Esta famosa frase, que se escucha muy a menudo una vez estamos en obra, conlleva incrementos de tiempo y de presupuesto que siempre terminan de la misma forma: reduciendo calidades de algunos materiales, eliminando elementos que no se ven con el objetivo de mantener intacto el presupuesto inicial o incrementando los costes de obra y desequilibrando nuestra economía familiar.

Mi consejo es que no escatiméis en elementos ocultos como pueden ser las instalaciones o el aislamiento ya que, a pesar de que no se ven, dan confort a la vivienda, y a la larga suponen un ahorro económico y el bienestar de la familia.

4. ANALIZAR LOS DIFERENTES PRESUPUESTOS, RESERVA UNA PEQUEÑA CANTIDAD PARA IMREVISTOS Y FIRMA UN PRESUPUESTO

Es aconsejable, previo al comienzo de la obra, tener varios presupuestos de diferentes empresas constructoras. Yo siempre recomiendo comparar 3. 

Es importante no fijarnos solo en el precio final, sino en la descripción de las partidas. ¿Qué se incluye? ¿De qué están compuestas unas partidas u otras? Cualquier duda deberíamos preguntarla. Exige un presupuesto detallado. No te conformes con partidas al alza. Sobre todo, debemos comparar cantidades y materiales iguales para tener certeza de que nos están presupuestando lo mismo. Os recomendaría recurrir a un profesional para que os agrupe las ofertas de las diferentes empresas y os elabore el comparativo (Consejo nº2).

Se flexible con los imprevistos. Siempre es aconsejable tener una previsión en el presupuesto de una bolsa extra del 10% del total para posibles imprevistos o mejoras que pueden surgir durante la obra. Si el proyecto consiste en una reforma, con mayor interés deberás tener este margen, al fin y al cabo, muchas veces pueden aparecer vicios ocultos difícilmente detectables antes de comenzar a demoler.

Una vez hayas tomado la decisión sobre la mejor oferta y te hayas asegurado de que todo está valorado, te aconsejo que firmes un presupuesto de obra. Es importante tener claro las fechas y cantidades de pago. Asegúrate de pagar lo que realmente se haya ejecutado en la obra.

5. NO TE OLVIDES DE LA ILUMINACIÓN Y EL MOBILIARIO

Son partidas que van a formar parte de tu vivienda aunque no estén dentro del presupuesto de obra. ¿Por qué, no querrás entrar a vivir en una casa vacía?

Haz un listado con todo el mobiliario que vas a necesitar y establece prioridades. Es posible que el sofá se un imprescindible, pero la butaca quizá pueda esperar.

Tanto la iluminación decorativa como el mobiliario suelen ser los grandes olvidados, si a eso le sumamos que son los últimos en llegar, se forma un combo horrible. Me encuentro muy a menudo con casas preciosas que se han convertido en un horror por no tener bastante presupuesto para vestirlas.

6. OPTA POR ELEMENTOS ATEMPORALES Y PRÁCTICOS

Evitar que tu casa pase de moda rápidamente y que te siga enamorando como el primer día pasa por escoger elementos atemporales. Mi consejo es que puedas combinarlos con elementos más novedosos que den un punto rompedor a nuestra casa y sean fácilmente sustituibles cuando te canses de ellos. 

También es importante que, a la hora de elegir estos materiales y elementos, antepongamos la funcionalidad a la estética. Ante todo, buscamos una casa práctica que nos haga la vida fácil.

7. TENER UNA FIGURA QUE COORDINE LOS OFICIOS

La coordinación de una obra no es sencilla. Hay que tener en cuenta que por nuestra vivienda pasarán numerosos oficios: albañiles, carpinteros, cerrajeros, fontaneros, electricistas, pintores, marmolistas, etc. que hay que coordinar a la perfección para que la obra no se dilate en el tiempo a la espera de disponibilidad de cada uno.

¿Quién va a coordinar a todas estas empresas? Cada oficio debe entrar en un momento determinado, incluso en varios momentos a lo largo de toda una obra. Para que todo trascurra con normalidad y se cumplan plazos es importante contar con una persona o constructora que se encargue de la coordinación. Te aseguro que si delegas la coordinación de la obra te ahorrarás dolores de cabeza, tiempo y dinero.

8. FIRMAR CONTRATO Y EXIGIR PLAZOS

Es muy importante formalizar un contrato con la empresa constructora. Evita acuerdos de palabra, ¡se las lleva el viento! Todo por escrito. En este documento se deberán fijar entre otras muchas cosas la fecha de finalización de la obra. Te recomiendo que solicites a la empresa constructora una fecha de compromiso de finalización y una planificación con la que poder llevar el seguimiento de los plazos.

El contrato será tu garantía en caso de cualquier situación adversa.

9. CONTRATAR LIMPIEZA FINAL DE OBRA EN CONDICIONES

Parece mentira, pero nunca nos preguntamos quién va a limpiar una obra y así, poder entrar a vivir cuánto antes en nuestra casa.

Suele ser una partida habitual en la mayoría de presupuestos. Pero quiero que sepas que existe una gran diferencia entre limpieza de obra y una limpieza final a fondo de nuestra casa.

En muchas ocasiones, lo que se presupuesta es una limpieza que consiste en quitar la suciedad más superficial de la obra, sin entrar en el detalle. Este tipo de servicio no nos permite entrar a vivir, o por lo menos, no nos permite entrar a vivir en lo que yo considero una casa limpia. Por ello, es muy importante que comentemos este apartado con la empresa constructora o empresa de limpieza. El fin es asegurarse bien de qué tipo de limpieza estás contratando.

10. VISITA LA OBRA COMO CLIENTE Y EXIGE

No hay que tener miedo a visitar la obra como cliente, ¡es tu casa! Te aconsejo que lo hagas con el arquitecto o interiorista. Pregunta cualquier duda que te surja, estás pagando por tu sueño. Además, te servirá para comprobar lo que se está haciendo y cómo se está haciendo. Hacer un seguimiento de la obra te dará tranquilidad y te ilusionará al ver como tu casa avanza.

¡Ahora que ya sabes todo esto no tienes que tener ningún miedo! Y si aún te queda alguna duda, puedes escribirme a info@lidiamolina.com. ¡Estaré encantada de atenderte!

Logotipo formado por letras en color negro donde se lee el nombre de la arquitecta Lidia Molina
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